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Arquitectos: Luis Barragan
- Área: 2500 m²
- Año: 1940
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Fotografías:Arturo Arrieta
Aunque la obra del arquitecto mexicano Luis Barragán es mundialmente reconocida y estudiada debido al invaluable compromiso con la arquitectura de su tiempo y su contexto hasta apenas hace un par de años, gran parte de la obra construida e incluso de los procesos de diseño representaban un gran misterio debido a la poca difusión y registro. Sin embargo, actualmente debido a distintos esfuerzos es posible estudiar el legado de su arquitectura desde una mirada contemporánea que devela la permanencia de sus gestos, sentando las bases para conformar la identidad de lo que hoy se conoce mundialmente como “arquitectura mexicana”.
Uno de estos ejemplos poco explorados es el caso de la Casa Ortega, una obra construida entre 1940 y 1942 la cual fue habitada por Barragán de 1942 a 1947. Se trata de un espacio de carácter habitacional inspirado en los patios y jardines de la Alhambra y el Palacio Generalife el cual ha conservado su diseño original, así como sus vibrantes colores y las variantes vegetales naturales que la han habitado a través de los años. Actualmente, este espacio se encuentra en la lista del Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO y se conoce como “el mejor secreto guardado de Luis Barragán”.
Este proyecto es el primero en el que el arquitecto mexicano trabaja para sí mismo por lo que representa un gran laboratorio de experimentos y gestos que conformarían el sello que lo posicionó como uno de los arquitectos más reconocidos a nivel mundial. Además, el gran trabajo de paisaje realizado en este lugar devela una profunda sensibilidad por los jardines y la contemplación de la naturaleza. En 1947 esta casa se vende al Sr. Alfredo Ortega, platero de la Ciudad de México para reunir capital que se destinaría al proyecto de Jardines del Pedregal.
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En 1941 realicé en la Ciudad de México mi primer jardín. Adquirí un terreno con diversos desniveles, complementé y nivelé diversas plataformas para crear un jardín en compartimentos, recordando la belleza de los patios y jardines de la Alhambra y el Generalife.
- Luis Barragán
Este proyecto es un laberinto lleno de sorpresas visuales y perspectivas que ofrecen una experiencia sumamente interesante al cuerpo a partir de sensaciones térmicas provocadas por las texturas de los espacios, los colores y los microclimas en los patios. Se develan claras intenciones de traer el jardín adentro de la casa empleando grandes ventanales, y de llevar la casa afuera con las terrazas semi-cubiertas que abrazan estos umbrales entre el interior y el exterior.
La arquitectura de esta casa permite observar gestos vernáculos y coloniales, con detalles que te transportan a las primeras casas que diseño Luis Barragán en Guadalajara; se observan también elementos de su arquitectura moderna de los años 35 a 40 y con elementos arquitectónicos da pistas de su siguiente y última etapa, la más conocida, que lo llevó a culminar la Casa-Estudio vecina. A la fecha se conserva el mobiliario original diseñado por Clara Porset, Michael Van Beuren, George Nelson, Luis Barragán y su ebanista Eleuterio Cortéz.
La casa-jardín ha conservado su diseño original junto con los jardines que después de casi 80 años, se han mantenido con las variaciones vegetales naturales e intencionales que el paso del tiempo y sus habitantes le han dado. A pesar de esto y de la modificación agresiva de su entorno, la armonía y la fuerza del proyecto paisajístico inicial son tan grandes, que todavía hoy estos jardines son tan impresionantes como lo debieron ser cuando fueron originalmente creados.
Para más información y recorridos guiados visita Casa Ortega.
